La intervención realizada por los arquitectos españoles de Longo + Roldán permite responder y solucionar de buena manera un espacio residual que, sin quererlo, estaba ganando un gran protagonismo al interior de una cantera, ubicada en el conjunto industrial de Caleras de San Cucao, en Llanera.
En lugar de construir nuevos edificios o remodelar las casetas existentes, se diseña una estructura reticular de pletinas metálicas que conforma una trama de jardineras de distintas profundidades, incluyendo diferentes especies vegetales. La solución no sólo revitaliza el espacio, sino que además protege a las construcciones existentes del sol, mejorando sus condiciones térmicas.
Descripción por los arquitectos. La intervención se realiza en el conjunto industrial de Caleras de San Cucao, en Llanera, un área fabril dominada por la presencia de edificaciones asociadas a la actividad desarrollada.
Tras construir una escalera que comunica los dos niveles de la cantera, una zona hasta ese momento totalmente residual en la que se ubican varias casetas de obra destinadas a laboratorios pasa a formar parte del nuevo recorrido, percibiéndose además desde ambos niveles, lo que evidencia la necesidad de darle un tratamiento que genere una visión atractiva para el visitante.
En vez de plantear una nueva edificación para albergar los usos actualmente asociados a las casetas, se decide optar por una solución más económica y sostenible, manteniendo las mismas sin alterar ni su forma ni su aspecto, pero disimulándolas al velar su presencia bajo un jardín elevado, que las cubre visualmente y las protege al mismo tiempo del sol, mejorando por tanto sus condiciones térmicas.
Una estructura reticular de pletinas metálicas va conformando una trama en la que se encastran, con una distribución aleatoria, jardineras de diferentes profundidades, dando lugar a un juego compositivo en la percepción tanto aérea como frontal. En caso de lluvias, las jardineras son como una especie de tiestos, perforadas por debajo y al llevar un geotextil, el agua cae filtrada y limpia.
La elección de las distintas especies vegetales, en colaboración con el jardinero responsable del mantenimiento del conjunto industrial, responde tanto a su facilidad de adaptación a un medio hostil, con fuertes oscilaciones térmicas, frecuente niebla y partículas sólidas en suspensión, como a la intención de jugar con los periodos de floración y las diversas tonalidades de las hojas para generar cierto contraste cromático.
Entre los pilares que soportan la nueva escalera la falta de sol impide pensar en un tratamiento vegetal, por lo que se recrea un jardín seco con una composición a modo de muestrario de los minerales utilizados en una de las empresas ubicadas en el recinto.
Arquitectos: Longo + Roldán Arquitectos (Víctor Longo Valdés + Ester Roldán Calvo)
Situación: San Cucao, Llanera, Asturias, España
Fecha Proyecto: 2012
Fecha Construcción: 2013
Cliente: Caleras de San Cucao, S.L.
Empresa constructora: Estructuras Metálicas El Rubio, S.A.
Fotografías: Marcos Morilla